martes, 1 de noviembre de 2011

Cajas de Restos


Como pasa el tiempo, aún recuerdo aquellos lejanos años en los que no había miniaturas sino sólo una miniatura repetida hasta el infinito hasta formar no ejércitos de clones sino de fotocopias. Que nostalgia me producen aquellos orkos de 40.000 de la tercera edición, tan serios, tan sonrientes, tan bien armados, tan idénticos…..
Aquellas miniaturas eran un milagro, hasta entonces los pocos a los que nos gustaba los soldaditos, especialmente aquí en ultramar, no teníamos más alternativa que los nunca bien ponderados 1/72, ni un triste bolter que llevarse a la mano. Eran tiempos en los que los transformadores de miniaturas eran una casta, una élite que atesoraba los secretos arcanos de las cuchillas y las masillas de doble componente, el resto sólo éramos la masa que admiraba y babeaba. Pero apareció el multicomponente y las miniaturas despiezadas (dios salve a Games Workshop y a las nuevas inyectoras de plástico), el juego se democratizó, la transformación estaba al alcance de todos los mortales (Dioses del caos….), sin peligro de dejarse un dedo en la refriega.



Pero para muchos es una maldición….¿Qué leche hago con todas estas piezas que sobran de las matrices?..... Amigo tienes un tesoro bajo tus narices, infinitas combinaciones para crear tus propias miniaturas, únicas, originales, casi irrepetibles.

Yo tengo varios ejércitos de 40.000, uno de ellos digamos que es de Cicatrices Blancas (me encantan las armaduras blancas, debilidad por los stormtrooper de Star Wars), pero me cansé de los cascos y de las cabezas calvas (es una triste historia, algún día te la contaré). Por suerte soy viejo (la vejez es proporcional al tamaño de las cajas de piezas sueltas y restos acumulados) y tenía un número importante de cabezas de guardias de Catachán (esos astartes sin armadura), así que me dediqué al intercambio de cabezas (ay si pudiéramos hacerlo con la gente….) y toma allá…. me encantan los astartes con cara de Rambo a punto de dejar de sentir las piernas……

En fin camarada….. anímate a la combinatoria, no desprecies ni la más pequeña de las piezas de sobra, es una miniatura en potencia…….

Héctor Mendoza

1 comentario:

  1. Ains, que viejo me han hecho de repente. Lo digo porque mi caja de restos es ya de un tamaño que, si bien no puede considerarse tan significativa como la del que firma el artículo, raya lo venerable.
    A mi también me encantan las conversiones, todas y cada una mis miniaturas son diferentes entre si. Y es que me parece que es un deber, el amedrentar a tus contrincantes con la variedad. ¿Cual será la que machará a chetado general?... ¿Este que tiene la mano señalándole, o este, que porta el arma en posición de "toma, toma, pastillas de goma"? Todas tienen algo que hará que las mires desconfiado ;D

    Un saludo!!!

    ResponderEliminar